En Setdart hemos creado una selección única de joyas, que presentaremos en subasta el 16 de diciembre. Entre las maravillosas piezas que hemos reunido, destacan las de rubies y, en este post, os ofrecemos una guía para comprar el rubí perfecto.
Rubí: más que un material
Desde la antigüedad, el rubí ha sido más que un material, siendo considerado un símbolo, al que las distintas sociedades han atribuido distintos significados. Por ejemplo, los antiguos birmanos lo consideraban la piedra de los soldados y la mitología hindú lo consideraba el “rey de las piedras preciosas”.
La popularidad del rubí ha trascendido en el tiempo y ha sido protagonista la vida de personajes icónicos, como Elisabeth Taylor, a quien, su marido, Mike Todd, regaló un espectacular conjunto de rubíes y diamantes, o el anillo de compromiso de la princesa Margarita de Inglaterra, que era un tresillo de rubíes orlados por diamantes.
- Color y pureza
Su color puede variar de rojo intenso, casi violáceo, a un rojo rosado, que se acerca bastante a la apariencia de un zafiro rosa. Esta característica es determinante para conocer su valor, el rubí perfecto tiene un carmesí intenso y rico. Es importante recordar que, las piedras de color a menudo tienen inclusiones dentro de la piedra, parte de su “ADN”. La rareza significa valor, y no te preocupes si las ves, ya que hacen que tu piedra sea única.
- Tratamientos
Debes solicitar información sobre todos los tratamientos que se le hayan aplicado, ya que pueden influir en el precio del rubí. Es muy común que haya recibido un tratamiento térmico, lo cual es completamente aceptable. Pero, si se trata de una piedra de tamaño y cualidades considerables, siempre es recomendable certificarla en un laboratorio gemológico.
- Talla
Existen diversos tipos de talla, por ejemplo, entre las más habituales encontramos las tallas ovaladas y la denominada cojín. Entre las más originales, destacamos la talla corazón, que es más difícil de encontrar.