Ramon Casas y Miquel Utrillo dieron luz a la que fue una de las revistas artísticas mas prestigiosas a nivel internacional.
La creación de la revista
El espíritu renovador, que definió la Europa de finales del siglo XIX, arraigó en Catalunya gracias, en parte, al papel fundamental que adquirió la mítica revista Pèl & Ploma. La que ha sido la publicación más emblemática y representativa del Modernismo catalán, nació el 3 de junio de 1899 y hasta su última publicación, en el año 1903, que marcó el fin de la gran época del Modernismo, divulgó y promocionó, en cada uno de sus 100 números, la efervescencia de la nueva escena intelectual y cultural.
Continuando el trabajo, que iniciaron Els Quatre Gats, L’Avenç y Catalònia, e inspirándose en las revistas artísticas europeas más prestigiosas en el ámbito cultural, Pèl & Ploma fue concebida, a cuatro manos, por el pintor Ramón Casas y por, el artista y crítico de arte, Miquel Utrillo. De hecho, el propio nombre de la publicación alude a esta dualidad creativa. Mientras que, el “Pèl”, Ramon Casas, ejercía de ilustrador dando muestra de su magistral talento, como dibujante retratista y cartelista, la “ploma” de este tándem fue Miguel Utrillo, quien, como único redactor de la revista, durante el primer año, logró alcanzar un gran prestigio como crítico y experto de la cultura artística moderna. Su fiel complicidad con personalidades nacionales, como Rusiñol, Zuloaga, Sorolla, Meifrèn o LLimona, se sumó a sus extensos conocimientos, entorno a lo mejor de la cultura moderna y a las nuevas estéticas procedentes de Europa, logrando conectar de este modo, el modernismo catalán con la escena internacional.
Difusión y éxito
Pese a que fueron ellos los impulsores y encargados de gran parte del contenido publicado, fueron muchos los personajes ilustres que contribuyeron a engrandecer el prestigio de la revista. Entre ellos, podemos destacar las colaboraciones de Apel.les Mestres o Santiago Rusiñol, en el ámbito literario, mientras que, en el ámbito artístico, contaron con la participación de figuras tan relevantes, como Picasso e Isidre Nonell.
A estas colaboraciones estelares, tenemos que sumar el ingenio de Casas y Utrillo a la hora de promover la revista. Con el fin de conseguir nuevos suscriptores y difundir los dibujos de Casas, ambos artífices demostraron una vez más su aguda pericia, incentivando actuaciones de promoción, que bien podrían ser las precursoras de las estrategias de marketing modernas. Para ello, actuaron en 3 direcciones distintas:
Por un lado, distribuyeron facsímiles que periódicamente repartían ayudando a difundir la revista. Otra de las vías que emplearon fue la celebración en la Sala Pares de Barcelona de muestras artísticas en las que se exponían entre otros, dibujos de Casas que habían sido publicados en la revista.
La que fue su primera iniciativa sería, probablemente, la que mayor efecto surgió: Ramon Casas realizó diversos dibujos, cómo regalo para los suscriptores anuales, en agradecimiento a su fidelidad, ejemplo de ello es el dibujo en la licitación.
Las ilustraciones de Ramon Casas
Como vemos, el tema preponderante de los dibujos que publicará en Pèl & Ploma será el de la figura de la mujer. De hecho, la temática femenina se convirtió en una constante en su obra, del mismo modo que lo fue de la corriente modernista, de la que Casas sería uno de sus máximos exponentes. Ya fuera paseando por las calles, disfrutando de una ópera o fumando y bebiendo en los glamurosos cafés de la ciudad, el artista retrata a un prototipo de mujer elegante y sofisticada que, en sus actitudes, rebosa un nuevo aire de modernidad. Pese a la economía de medios, sus ilustraciones de líneas sinuosas, delicadas y expresivas, a partes iguales, muestran una exquisita capacidad descriptiva, que no hacen más que resaltar la inmensa sensibilidad que desborda su obra.
En definitiva, Ramo Casas y Utrillo hicieron de la revista Pèl & Ploma un estandarte de libertad y modernidad que, aun hoy en día, es un ejemplo de excelencia en el mundo editorial.
